Nada externo a ti puede hacerte daño, nada externo a ti puede salvarte

Una de las ideas centrales en las que nos apoyamos es que no empleamos bajo ningún concepto la intervención. Esto se puede entender como cualquier elemento externo que sirva para devolverle el aparente equilibrio al consultante. No tenemos nada en contra de las aplicaciones externas, sean alopáticas, homeopáticas, tratamientos energéticos, dietas  o cualquier otra cosa. En este aspecto somos totalmente indiferentes, la persona sabrá qué tipo de tratamiento quiera o no quiera llevar.

Nos basamos en la intención de encontrar la causa raíz del conflicto que está impidiendo el estado que desea alcanzar el consultante. Entendemos que la desarmonía o estado de desintegración fue y es creado por la persona, por ello la armonía o integración sólo puede ser logrado por dicha persona. El problema y la solución residen en el interior.

Por lo tanto, no trabajamos de afuera hacia adentro, sino de adentro hacia afuera. Simplemente acompañamos, asistimos e informamos a la persona durante este viaje. Será él o ella quién vaya a tomar las riendas y ponerse en camino. Somos como un guía turístico acompañando al consultante a través de un recorrido que percibe como oscuro, escondido y embarrado; y vamos con una linterna que ayude a la persona a ver lo que hay por este camino, las rocas, las caídas, las trampas, etc… para que él o ella lo pueda ver y tomar la decisión de andar o no por ese sendero.

Somos un google map imparcial y neutral que simplemente señala la mejor ruta que tenemos registrado para que pueda llegar a destino. Sólo requerimos la data necesaria: donde está y a dónde quiere llegar. Es la propia persona quien va a decidir que quiere conocer y hasta donde llegar, nosotros se lo señalamos y respetamos su proceso.

Por ejemplo, un consultante está situado en una enfermedad, llamémosle cáncer, y quiere llegar a la sanación de ese cáncer. Nosotros le ofrecemos entonces una ruta, de forma totalmente neutral y sin implicarnos con las creencias, valores, juicios o prejuicios de la persona. Esta ruta no implica el uso de nada externo, sólo un acompañamiento hacia el interior donde reside todas las respuestas a las preguntas.

No imponemos un sistema de creencias, un paquete prefabricado de soluciones y respuestas. No. Acompañamos, auxiliamos e informamos. Lo demás queda en manos del consultante.

Ahora sí, trabajamos con una planilla y una metodología, si se quiere, para hacer el acompañamiento. Si uno está en A y quiere informarse como llegar a B, puede hacerlo de muchas maneras: preguntando a alguien de la calle, con un GPS, a través del google map, etc… Nosotros ofrecemos una manera, que emplea las bases de la biodescodificación y el acompañamiento transpersonal.

Nuestro único propósito es acompañar a la persona a que sea VERDADERA y AUTOREFERENTE. No tratamos de darle la píldora mágica para que desaparezca lo que percibe como problema, no le ofrecemos ni promesas ni garantías. Sólo le mostramos un camino, un camino interior donde pueda ver con mayor facilidad aquello que realmente es. Para que pueda ver el potencial de su semilla única e irrepetible, y así poder florecer.